Zoológico Zombie

La guerra es quizás la peor enfermedad de la que puede ser testigo el planeta, ya que no existe cura para esta en tanto los seres humanos se empeñen en no resolver sus diferencias de cualquier índole de una manera pacífica. La destrucción que puede causar una guerra quedó nuevamente demostrada en el 2015, en la franja de Gaza, en donde no solo los seres humanos fueron fuertemente afectados, sino que los animales se llevaron la peor parte.

El zoológico de Jan Yunis fue fundado en el 2006 por un hombre amante de los animales llamado Mohammed Owaida. En diversas entrevistas que se le realizaron este expresó que su intención con la creación del zoológico era simplemente darle un poco de diversión a todas las personas que se encontraban atrapadas en ese lugar como motivo de los conflictos bélicos que se desarrollaban en la zona. Al inicio de todo el zoológico comenzó con 92 animales, entre los cuales se encontraban aves, tortugas e incluso tigres. Según el dueño del zoológico inicialmente alimentar a los animales le costaba un total de casi 300 dólares al día, suma que conforme los animales se iban reproduciendo, iba en aumento. Todo esto empeoró cuando comenzaron con los atentados y ningún habitante de la zona quería asistir al zoológico por miedo a salir de sus casas y morir.

Con el declive de ingresos a causa de la falta de público, los animales comenzaron a enfrentarse a momentos de verdadera miseria, en donde los cuidados más básicos como la alimentación y el agua eran prácticamente nulos y cuidados más especializados como aquellos que solo un veterinario puede brindar, eran solo una fantasía. Tal situación desencadenó que los animales comenzaran a morir en un ritmo muy acelerado a tal punto que para inicios del año 2015 el número de animales en el zoológico se redujo a 55 solamente.

Pero esto no es lo peor de todo, ante tal situación Mohammed tuvo una idea que para muchos en estos días continúa siendo un tanto enferma. El decidió no cerrar el zoológico y en cambio habló con varias personas de la zona expertas en taxidermia para embalsamar a los animales que habían muerto como producto de la guerra, con la finalidad de mantener la ilusión de los niños, pero con esto lo único que consiguió fue recrear lo que muchos llamaban como un tétrico cementerio animal, en donde algo tan absurdo y terrorífico como el hecho de animales en descomposición y otros embalsamos con la máxima expresión de miedo y terror en sus rostros, era común de ver dentro de las instalaciones, en ocasiones, en las mismas jaulas que estaban ocupadas por animales vivos.

Esta decisión solo duro un par de meses, luego de que en un período de guerra que se entendió por 50 días y los animales estuvieron todo ese tiempo sin recibir ningún tipo de cuidado nuevamente, el número se redujo nuevamente de manera considerable dejando a tan solo 15 de ellos con vida y en condiciones de desnutrición extrema, por lo que Mohammed finalmente accedió al cierre del zoológico. Los 15 animales fueron rescatados por la ONG International Four Paws en agosto del 2016, y trasladados a lugares como Sudáfrica, Israel y Jordania, en donde comenzaría una nueva vida, con mejores cuidados, pero sobretodo alejados de todo el mal que causa la guerra.

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